Tesoro: el increíble hallazgo que hizo una niña con un detector de metales

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La mayoría de los europeos son conocidos por su inclinación en descubrir objetos con sus detectores de metales. Y es que más que tratar de descubrir algo, esto se está volviendo casi un hobby, por lo cual, aparte de bueno, resulta asombroso debido a todas las cosas que se encuentran, tal es el caso de una niña que encontró una moneda cerca de un castillo que había sido habitado por vikingos.

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Según un comunicado de Nordjyske Museer, el hallazgo tuvo lugar cerca de Hobro, una ciudad al norte de Dinamarca, y son al menos 300 piezas de plata que han catalogado como un tesoro, ya que se cree que tienen 1000 años de antigüedad.

Y de acuerdo a National Geographic, a principios del siglo IX, en un antiguo pantano de Ribe, Dinamarca, fue encontrada una moneada vikinga y que en una de sus caras aparece quien aparentemente podría estar representando al rey danés Godofredo I de Dinamarca, y en la otra cara de la moneda tiene plasmado un venado con una serpiente y al fondo un sol.

En ese entonces se ayudaron de una excavadora y detectores de metales para una investigación que ya se había vuelto arqueológica. Donde se fueron encontrando más monedas, al menos unas 250, lo que desconcertó a los investigadores fue que estaban muy bien conservadas.

Así que, el hallazgo de la niña no fue el primero en realizarse, aunque sí encontró muchas más en un solo día.

Pero esto no es todo, esta noticia sigue siendo muy impactante, pues aparte de las monedas que fueron encontradas, también venían dos piezas de joya que, de acuerdo a los estudios arqueológicos, estás provienen de Irlanda, en la era vikinga.

Estas joyas tienen un peso aproximado de 70 gramos, y resultaba evidente que ambas piezas pertenecían a la misma joya, lo que significaba que estaba partida, pero no sabían con exactitud si a la mitad o en varias partes.

Estas piezas pertenecían a alfileres de anillo, que eran portados por vikingos de la “alta” sociedad, y la revelación vendría aquí… estas piezas solo eran pequeños fragmentos de joyas que pesaban alrededor de medio kilo.

Y si te preguntas, ¿quién desperdicia así las joyas? La conclusión a la que se llegó es a que tal vez a los estos vikingos no les agradó del todo la finura de la joya, pues solo se centraban en el peso de esta, retirando el alfiler de dichos anillos, dejándolo en pedazos (tal como se encontró) y se usaron junto a esas monedas como método de pago.

La verdad todo esto resulta demasiado interesante, pues tienen casi mil años de antigüedad, y pensar en que se están tocando piezas que los vikingos manipularon, es realmente fantástico.

Como dato extra, no te preocupes que a la niña la van a compensar muy bien por su increíble descubrimiento, y en cuanto al tesoro, este será puesto en exhibición en julio, en el Museo Histórico de Aalborg en Dinamarca.

Fuente: ensedeciencia.com

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